El Champaquí­ desde Los Molles

 

Hací­a mucho no disfrutábamos el Champa como en esta oportunidad. El sábado fue un dí­a a pleno sol, aunque comenzamos con la luna, a las 3 de la madrugada. Desayunamos a las 7:00, antes del segundo cruce del arroyo Los Molles, que nos acompañó toda la primera parte de la jornada. Llegamos al Hueco a las 9:00, tempranito, lo que nos permitió una merienda para reponer fuerzas, tomarnos un descanso y cargar agua, para luego encarar el desnivel de casi 900mts. La subida se sintió, transpiramos lindo hasta llegar al filo (bueno, esta es una visión optimista de dieciseis agotados caminantes con mochila en cuesta arriba), la vista inmejorable, el dique de La Viña, los campos cultivados. Llegamos pasadas las 16hs.

Por supuesto una vez armadas las carpas vino una siestita indispensable y reparadora. La reunión de la noche fue en una cueva cercana, y nos fuimos a dormir relativamente temprano con cielo estrellado… pero entrada la madrugada, llegó el viento… y el granicillo, la lluvia, y algunas inundaciones, con lo que algunos caminantes terminaron amparados en la cueva (ver fotos). Pura emoción, bah.

El domingo amanecimos mas tarde de lo previsto,esperando que pare la llovizna. ¡Qué lindo que se veia el valle! Mirábamos  la tormenta que se desarrollaba allá abajo, con rayos y todo.

Levantamos campamento, ya sin lluvia, y salimos rumbo al Champa; con estas condiciones de tiempo, eramos los únicos, todo para nosotros, ¡estaba tan lindo!. Luego de una cumbre en remerita, todaví­a nos dimos el lujo de decir… ¿y si buscamos otra forma, para no pasar por los caminos más trillados?

Por supuesto que fue un poco complicado, pero nos encontramos con cascadas, pampitas, bosques, y otras yerbas, de esas que de otra manera no se ven nunca, pasamos cerca del Lajoso (el cerro idem que está al sureste del Champa), y nos largamos a cruzar el rí­o a eso de las 4 de la tarde, para tomar el camino de 4×4 a Tres Arboles… el agua estaba tibia, como nunca la hemos sentido a esa altura ¡no se querí­a ir nadie! Llegamos al vehí­culo pasadas las 7 de la tarde, ya con un poco de neblina.

La pateada fue laaaaarga, pero quedamos hechos una sedita, con el alma descomprimida… Todaví­a nos maravillamos por la posibilidad de hacer cosas así­, ¡y seguir participando! Y del magní­fico humor del grupo, que cumplió con la peníºltima salida del año con todos los honores (De las 40 horas en el terreno, pasamos 22 en caminata ¡y todaví­a nos reí­amos!).

La promesa fue \»El próximo ¡pirkking o nada!\»

¡Hasta Diciembre, en La Retamilla!

Fotos gentileza de: Soledad, Verónica y Raúl

 

	Inicio Nocturno (3:02 A.M.)		Caminando por los Tabaquillos
	A la sombra, en el Hueco		Buscando agua
	Comienza a quedar abajo el Hueco		…¡y a quedar más, y más abajo!
	Vero en las Placas Coloradas		…y esto es lo que quedaba del resto en las Placas Coloradas
	Mientras, habí­a lagartijas que le hací­an al bulder…		… y otras, descansando luego de un big wall
	Pero al fin llegamos al acampe con buena vista (2600 m snm)		Y tuvimos una magnifica puesta de  sol
	La cena nos juntó en la cueva		Y a algunos, también la lluvia los llevó allí­
	…y los amontonó		Pero llegó el dí­a y nuevamente partimos
	Y otra vez a mirar por el balcón…		…que se veí­a así­
	Algunas se pusieron melancólicas con el paisaje		Y otros se dedicaron a buscar cosas nuevas
	Pero las flores nos alegraron (ahí­ nomás, al pie de la cumbre, a 2700 m)		Y llegamos a la cumbre, donde reinaba una paz no comíºn
	Nos juntamos para la fotos de todos los 16 todos		Y nos dedicamos a disfutar, cada uno a su modo
	Pero hubo que empezar a bajar en serio		Hubo tiempo para meditar sobre el futuro de la educación (¿?)
	La constante de la bajada: roca y cielo		Nos gustaron las cascadas que encontramos

	Tanto, que nos quedamos a almorzar en una de ellas		Y llegó la hora de cruzar el Rí­o Tabaquillo
	Así­ se veí­an los 700 m de desnivel que acabábamos de hacer		Y ya lo cruzamos al rí­o por íºltima vez. Nos restaba una larga caminata hasta el transporte

El recorrido que se acompaña, aprovechando la versión gratuita de Google Earth, es meramente descriptivo, no siendo apto para navegar por la montaña.

Así­ fue la cosa de ida (es laaarga la subida)

Y así­ fue de vuelta (también es larga la bajada)