Se fue el último del año

 

El segundo finde de diciembre (10 y 11) se llevó a cabo la peregrinación anual al santuario de pirkking de La Retamilla, tradición que ya lleva varias camadas de fieles a sus ceremonias tan diversas como nutricias.

Se dieron todas las condiciones para un evento memorable, incluyendo buen tiempo, algunas nubes para mitigar los soles de diciembre, buena onda para recorrer los kilómetros necesarios para llegar al destino, carne tierna para el asadito, y horno dispuesto para innovaciones culinarias. La partida arrancó de las Casas Nuevas, de la querida familia Bazán, que estaba inaugurando su nuevo salón en el puesto al pie de Los Gigantes; nos llevó por todo el borde norte del macizo, mostrando los paisajes que llevaron, hace 300 años, a definir como \»la cordillera\» al borde sur de la Estancia de La Candelaria, por donde discurre el sendero que transitábamos, enmarcado por el granito que hoy es meca de escaladores del centro del paí­s. El mediodí­a nos encontró en la puerta de la Retamilla, un espectáculo siempre renovado para descubrir la quebrada; y al poco tiempo, ya colocábamos las carpas en el puesto del Hueco Verde, que con las lluvias de la primavera, adquiere todo el color a que hace referencia su nombre.

Renglón aparte merecen las flores: una explosión de cactus, combinados con verbenas rojas y violetas, tréboles, portulacas (que son casi exclusivas de la zona), y diversas flores amarillas entreveradas en los prados verdes, que entusiasmaron a todos, especialmente a los fotógrafos. También hubo avistaje de aves varias, destacándose algunos cóndores posados en las cercaní­as del puesto y rondando la luna creciente, y en el retorno, un gauchito muy particular.

El horno de pan comenzó a funcionar casi de inmediato, con fogonero tucumano incluido, arrancando con chipá calentito, y siguiendo con 9 docenas de empanadas, cuya \»carbonada\», \»picadillo\» o \»recao\» en esta oportunidad fue aportado por una mano femenina, pero que \»sufrieron\» la colaboración de algunas manos para el repulgue, y de muchas más para consumirlas. También hizo falta, como todos los años, algíºn revoque extra para sellar un poco las pérdidas de calor. Por fin, el asado coronó la noche, que a cierta altura, mostraba miradas luminosas por esos extraños efectos de la sierra alta.

El domingo fue de tranquilo amanecer, con paseos varios que terminaron casi todos en los bordes de los arroyos, y con algunos remojones audaces, a pesar de las frescas agí¼itas serranas. Para las 5 de la tarde, el grupo ya habí­a llegado a Dos Rí­os, donde la espera del transporte se hizo \»remojados\» en el Rí­o San Guillermo. Todaví­a restó una parada nuevamente en lo de los Bazán, que nos esperaban con sus empanadas fritas, y algo de cerveza fresca, que acompañó al brindis de despedida, hasta el año que viene, de las actividades de la Subcomisión de Trekking.

ALGUNAS FOTOS MíS – Gentileza de Raíºl Benaví­dez, Sole Rojas y  Miguel Santaella

\"Tre_2_guia_nueva.JPG\" Probando nuevas guí­as \"Tre_3_quebrada_y_ruta_a_LR.JPG\" La ruta hacia la Retamilla
\"Tre_4_llegando_a_la_puerta.JPG\" Llegando a la puerta de La Retamilla \"Tre_6_quebrada_lateral.JPG\" Una quebradita lateral…
\"Tre_7_haciendo_chip__.JPG\" Haciendo el chipá \"Tre_12_empanadas_al_horno.JPG\" Buen fuego pa\’las empanadas

\"Tre_16_cascada.JPG\"

Cascada cerca del puesto \"Tre_16_pampia_con_circulos.JPG\" Cí­rculos en la pampita
\"Tre_17_pensativa.JPG\" Buena época para pensar… \"Tre_19_empezando_a_bajar.JPG\" Comienza la bajada
\"Tre_18_desayuno.JPG\" Desayuno envidiado \"Tre_20_quebrada_lateral.JPG\" El agua y la roca
\"Tre_21_pirca.JPG\" Largas pircas… \"Tre_22_saltando_pircas.JPG\" …¡para saltarlas!
\"Tre_23_dos_rios.JPG\" Los primeros en Dos Rí­os
MAS FLORES
\"Tre_30_cactus_plus.jpg\" Cactus con brillos \"Tre_31_geometrico.jpg\" Figura geométrica
\"Tre_33_rojo_rosa_amarillo.jpg\" Rojo, rosa y amarillo \"Tre_38_zenna_florecida.JPG\" Zenna florida

¡FELIZ 2006, Y BUENAS MONTAÑAS PARA TODOS!